BALNEARIO DE SANTA ELOISA (LOS NIETOS)

Los Nietos, perteneció a la diputación del Rincón de San Ginés. En 1886 se le calificaba como paraje, aunque en realidad era un finca privada propiedad de Pedro García Ros, a la que acudían rudos pescadores para realizar la pesca en sus mares. Por esa época la playa ya contaba con algunas casetas de baño, cuya propiedad era de gente adinerada de Cartagena y La Unión. 

A finales del siglo XIX, el empresario unionense y propietario de la  fábrica situada en El Algar, con depósito en el 47 de la calle Real de La Unión “Cerámica San Pedro”,  fabricante de mosaicos hidráulicos, piedras artificiales, tejas, losas, tinajas, ladrillos y platos, azulejos, cal hidráulica, yeso, cal lenta, cartón-piedra, y otros artículos,  Pedro García Ros instala un balneario con el nombre de Santa Eloísa, conocido como el “balneario de tierra”, por estar éste frente a las orillas del mar. Frente al edificio de construcción de obra, su propietario construye otro “el balneario del mar” hecho en madera y que estuvo situado sobre las aguas, donde hoy día se encuentra el actual y moderno de nuestros tiempos. 

El balneario es inaugurado el sábado 25 de Julio del año 1891. A dicha inauguración asistieron vecinos, autoridades locales de La Unión y Cartagena, fotógrafos como nuestro  Ángel Martínez y periodistas de todas partes que recogieron la noticia en la prensa de aquella época. Los asistentes visitaron las estancias del balneario, también tuvieron música, pues la niña Anita López Peñafiel  interpretaría el 'Ave María' de Gounod. 

El Balneario Santa Eloísa dispuso de amplias estancias amuebladas para albergar a familias, billares, salones de baile, casino y por supuesto tanto baños termales, como baños de mar, accediéndose a estos últimos a través de casetas de baño realizadas en madera, cuya pasarela conectaba ambos balnearios, el de tierra con el del mar. En su interior se encontraba el llamado 'Restaurant Francés', de los señores Mayans y Cerezuela, mismos propietarios que el Restaurant Francés de la calle Tetuán del municipio minero de La Unión. En él ofrecían almuerzos y comidas con un buen servicio, que incluía abonos para los bañistas, veladas amenizadas por el pianista Carmelo Vera Carrillo, espectáculos como la velada científico-musical a cargo del artista Fernández Zamora, que incluía “experiencias magnéticas”. 

Los clientes procedentes de Cartagena y La Unión podían ir en el tren hasta la estación de Los Blancos, y una vez allí, el balneario contaba con servicio de carruaje, para acercarles hasta la instalación marmenorense. 

En el año 1900 palabras de elogio hacia estas playas hacían eco, dictadas por el doctor Don Cándido, poseedor de un laboratorio bacteriológico en el número 83 de la Muralla del Mar (Cartagena) pronunciándose de la siguiente manera: 

SABIDO ES QUE EL AIRE DEL MAR FORTALECE A LOS NIÑOS, FAVORECE SU DESARROLLO, AUMENTA SUS FUERZAS MUSCULARES Y TIENDE Á DESTRUIR O A COMBATIR LOS EFECTOS DE LAS CONSTITUCIONES LINFÁTICAS, UNA DE LAS LLAGAS MÁS INFECCIOSAS DE NUESTRAS SOCIEDADES MODERNAS. LA MEDICACIÓN MARÍTIMA PUEDE HACER DE UN NIÑO DÉBIL, UNO FUERTE Y DE UN NIÑO FUERTE UN HOMBRE ROBUSTO.

LOS BAÑOS DE MAR SON EL COMPLEMENTO OBLIGADO DE LA EDUCACIÓN FÍSICA DE LOS  NIÑOS  Y AL CONTRARIO DE LO QUE SUCEDE CON LOS BAÑOS DE AGUA DULCE QUE SON DEBILITANTES; EL AGUA DEL MAR ES SIEMPRE RECONSTITUYENTE.

EN LAS ESPACIOSAS PLAYAS ARENOSAS DE LOS NIETOS LA ATMÓSFERA TIBIA, VIVIFICADORA, ESTÁ IMPREGNADA DE MOLÉCULAS SALINAS, ENCONTRANDO LOS NIÑOS REEDIFICADORES HIGIÉNICOS PODEROSOS, CORNO NO SE ENCUENTRAN SIEMPRE EN OTRAS PARTES, Y QUE FAVORECEN LA ACCIÓN TAN SALUDABLE DE ESTOS BAÑOS DE MAR TERMALES. 

AQUELLA ATMÓSFERA REPARADORA REGENERA LAS FUERZAS PERDIDAS Y LAS SALUTÍFERAS AGUAS A LA TEMPERATURA DE 28º CENTÍGRADOS CARGADAS DE GRANDES CANTIDADES DE YODO, COMBATEN DE UNA MANERA ADMIRABLE TODA CLASE DE ENFERMEDADES ORIGINADAS POR LOS GRANDES AZOTES DE LA INFANCIA, EL LINFATISMO Y EL ESCROFULISMO EN SUS MÚLTIPLES Y VARIADAS MANIFESTACIONES.

NO ES DE EXTRAÑAR PUES, QUE LOS  MÉDICOS LAS RECOMENDEMOS A NUESTRA CLIENTELA Y  QUE LOS PADRES CONCURRAN CADA  AÑO CON  SUS  HIJOS A ESTA ESTACIÓN BALNEARIA QUE BIEN PUEDE CALIFICARSE DE PRIMERA CLASE, EN LA SEGURIDAD DE ENCONTRAR SU VERDADERA RECONSTITUCIÓN FÍSICA EN EL AGUA Y EN LA ATMÓSFERA  MARÍTIMA DE ESTAS PLAYAS.

Iniciado el nuevo siglo (año1900), tiempo en el que construyen e inauguran la iglesia del paraje de Los Nietos, es Simón García Cabezos (hijo de Pedro), el dueño arrendatario del balneario. Este afincado en el municipio de La Unión fue comerciante, industrial, empresario minero, banquero y político. Por esos años, el balneario ya contaba con una enorme explanada, en la cual hubo una farola de enormes brazos, siendo lugar éste, de continuas verbenas al disfrute de la brisa fresca del mar menor. 

Con los años eran varias las familias cartageneras y unionenses, propietarias de magníficas posesiones, las que veraneaban allí. Muchas de ellas proyectaban desde allí  excursiones a la Encañizada y a Cabo de Palos, abordo de sus barcos de vela latina, que partían desde los embarcaderos que comunicaban con la orilla. D. José Ruipérez y su familia (cartagenero), D. Francisco Sánchez Olmo (Juez de 1ª Instancia de La Unión), Don José Pascual Ferrer (padre de Salvador Pascual), D. Miguel Pardo y D. Ponciano Maestre Pérez, ambos médicos de La Unión, o D. Francisco Illa y D. José Baeza Clemares, etc.

Pedro García Ros en el municipio de La Unión fue quién en noviembre del año 1899 construyera el Circo Teatro, situado en el solar frente a la antigua fabrica “La Francesa” (propiedad de Román Sánchez Sánchez). Un teatro que a pesar de ser de madera, no escatimó en decorados. 

EL TELÓN DE BOCA ERA LLAMATIVO Y DISPONÍA DE AMPLIOS CORTINAJES QUE DABAN PASO AL INTERIOR DE UN SALÓN DIECIOCHESCO, EN EL QUE APARECÍA UN PIANO Y ALGUNOS CRIADOS DE CALZÓN CORTO SIRVIENDO A LOS INVITADOS.

En 1891 fue concejal del Excmo. Ayuntamiento de La Unión, formando parte de la comisión creada para la construcción de la nueva iglesia del municipio minero. También fue uno de los ciudadanos que en 1893 aportó dinero para la Cocina Económica, haciéndolo con 50 pesetas.

Fueron los hijos de Pedro:
Simón García Cabezos (La Unión, 1877) casado con la señora Emilia Cánovas Campillo (La Unión,1876) y padre de Pedro García Cánovas (La Unión, 1896), Ana García Cánovas (La Unión, 1894) y Emilia García Cánovas (La Unión, 1900).
 Y Emilia García Cabezos la cual se casó el 24 de octubre de 1900 con Miguel Sánchez Moreno, cuya ceremonia curiosamente fue celebrada en la capilla del Hospital de Caridad de La Unión, ya que aun no estaba construida la Iglesia de Ntra. Sra. del Rosario.



POR: FCO. SILVENTE GLEZ.

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